Prisionero de tu Poesía

Me sentencias al viejo y cansado olvido,
cubres en secreto el camino que me aleja de esta soledad,
la única puerta de escape de este sufrimiento la has sellado,
tu fortaleza se levanta orgullosa en tu silencio soberbio,
aquél empíreo lugar donde me aguardabas lo has borrado,
la armadura de mis cruzadas ha sido corroída por tu indiferencia,
y qué me dices tú, causante de mi locura,
origen de estas indestructibles noches en vela,
por qué me alentaste a quererte con pasión profunda,
por qué me enseñaste a resguardarme en tu poesía,
mi pensamiento no duerme se sincroniza con mis latidos,
y una vez más en un mundo lleno de almas,
me dejas solo, te retiras y -pierdo todo lo que no me has dado-
y estos ojos que anhelaban verte se arrodillan, caen sobre tus huellas,
fenecen en el territorio esbozado por las fantasías de Morfeo.