Bartolomé Rodriguez Oliva

Enviado por AMANECER el Sáb, 19/02/2011 - 19:31.
Fueron pasando los años
hacia un mundo mejor caminábamos.
El mundo cada vez se hizo más raro.
Fueron pasando los años,
las flores se marchitaron
y se quemaron los campos.
Fueron pasando los años
y el sol ya no brillaba
sobre un mundo gris y nublado.
Fueron pasando los años,
los mares ya no cuidaban
sus millones de peces,
quedaron deshabitados.
Fueron pasando los años,
las ciudades solo son
de hormigón y asfalto.
Miles de generaciones fueron pasando
sin conocer un rayo de sol,
un cielo estrellado,
el olor del mar
y los verdes bosques y prados,
la espuma blanca de las olas
y el olor de las rosas y nardos.
Fueron pasando los años
y a nuestros hijos dejamos
un mundo lleno de espanto
sumido en el caos...

Me has dejado el corazón herido,
¡Tanto! Que me duele hasta el silencio.
¡Qué tristeza sin ti!
Qué triste oir los silencios del silenci.
¡Que vacio más profundo!
Tanto o más que las tinieblas del océano.
Me has dejado el corazón herido.
¡Tanto!que el aire hiela mis pensamientos.
Lloro por añorar tus encuentros
y echo en falta tus ladridos a cada momento.
Me has dejado el corazón herido.
¡Tanto! Que se me fueron los sueños,
sin tí me siento perdido
y por doler me duele hasta el aliento.
¡Que silencio más hondo!
Tanto o más que en el mayor de los desiertos.
Me has dejado el corazón herido.
¡Tanto! Que para mi no eres sólo un perro,
eres uno más de mi familia,
un ser íntegro, bueno,
¡Tanto! O más que un atardecer intenso.
Me has dejado el corazón herido.
¡Tanto! O más qu...

Ya no estas más a mi lado,
aunque noto tu presencia;
ya no estas más a mi lado
y siento que estás a mi vera.
Es el calor de tus horas, tus días,
las que extrañan tu ausencia.
Echo de menos los buenos ratos,
las tardes de charlas e inocencia.
El calor de una taza de café
alrededor de tu mesa.
Ya no estás más a mí lado,
ni para hacerte confidencias,
por eso le hablo al mar, al Sol,
al viento, a las estrellas,
aunque ninguno me dé respuesta.
Ya no estás más a mi lado
y quiero continuarte con mis poemas.
Ya no estás más a mi lado,
¡ Qué larga se me hace Tu ausencia!

Todo aquel que quiere imponer
su idea de libertad
viaja con cadenas en su equipaje,
para, desde su inmoralidad,
obtener beneficios infames.
Todo aquel que limpia la chaqueta
con una mano abierta
cierra la otra para golpear con coraje
y desde su indignidad
ser fiel a un cruel engranaje.
Todo aquel que no mira de frente
y deja sus pupilas en soledad
borda con sus iris un encaje
tupido para indecente ocultar
lo que esconde su ropaje.
Todo aquel que quiere imponer
su idea de libertad
prepara las cadenas en su bagaje
para, desde su impunidad,
viajar hacia horizontes inmorale

Y pisaré las calles mojadas
entre basuras en contenedores azules
cubriré mi rostro bajo las farolas
y apedrearé las ventanas con visillos de tules.
Vagaré en las encrucijadas solitarias
de las mayores urbes.
Y dormiré en lecho de cartones
recogidos en las superficies sin virtudes.
Cuando sienta frío y hambre
castigaré mi cuerpo con látigos volátiles
y el alcohol será mi sangra inútil.
Cuando sienta calor y sed
buscaré las aguas heladas
de las elevadas cumbres
y me sumergiré en mares contaminados
con peces muertos por la costumbre.
Y mojaré las calles con mis lágrimas
cuando la calor traiga
la sequía y la podredumbre.
Mi cuerpo desnudo será pasto de las llamas
desde el agujero frío de una cámara
y mis harapos recogerán el orín maloliente
de los perros y gatos vagabundo...

De las hojas de un libro
salen miles de pensamientos,
de ilusiones, de ideas
y hasta lamentos.
Las horas ocupadas en la lectura
no son matar el tiempo,
es darle vida a la vida,
vivir grandes momentos,
abrir nuevos caminos,
dar pasos certeros.
En las hojas de un libro
vivo, callo, engendro,
construyo un nueva vida,
procuro ocupar el tiempo,
dar sabor a la vida
sin hacer malo lo bueno.
Con las hojas de un libro
limpio las impurezas del alma,
filtro algunos recuerdos.
Envuelvo la soledad del día
para sentir un abrazo eterno.
En las hojas de un libro
cada día espero encontrar
un horizonte dorado,
un camino abierto
a la felicidad, a la dicha,
a la tranquilidad del sueño...

De las hojas de un libro
salen miles de pensamientos,
de ilusiones, de ideas
y hasta lamentos.
Las horas ocupadas en la lectura
no son matar el tiempo,
es darle vida a la vida,
vivir grandes momentos,
abrir nuevos caminos,
dar pasos certeros.
En las hojas de un libro
vivo, callo, engendro,
construyo un nueva vida,
procuro ocupar el tiempo,
dar sabor a la vida
sin hacer malo lo bueno.
Con las hojas de un libro
limpio las impurezas del alma,
filtro algunos recuerdos.
Envuelvo la soledad del día
para sentir un abrazo eterno.
En las hojas de un libro
cada día espero encontrar
un horizonte dorado,
un camino abierto
a la felicidad, a la dicha,
a la tranquilidad del sueño...

Lo que tus ojos dicen,
amor,ternura, generosidad,
no lo dicen tus hechos
y por no decir no dicen
ni siquiera te quiero.
Lo que tus ojos dicen
lo adivino en un momento,
sólo necesito tenerte cerca
para de soslayo saber
lo que tu mirada siente,
que me quieres como te quiero.
Lo que tus ojos dicen
lo ocultan tus sentimientos.
Tus ojos son los traidores,
los que me dicen que dices,
muy a tus adentros:
por ti muero.
Lo que tus ojos dicen
es lo que yo quiero,
amarte eternamente,
pasear junto a mi lado
por la orilla de la mar
y gritarle al viento ¡ te amo¡