Evocación

A orillas del mar,
virtudes y vicios
muestran su faz humana.
Nada hay más real
que el impulso vivificante,
que la inteligencia e imaginación
apartando velos de oscurecimiento,
falsas corazas
y máscaras de vaciedad.
Un remolino de viento
nos despierta del letargo,
levanta nuestro decaído vuelo,
nos conduce hasta esferas
donde nuestro pecho se inflama
de un amor generoso.
Ahí disfrutamos
de la belleza del alma,
en un océano sin conflicto,
en una extraña región
donde la conciencia
es verdadero espejo del alma.
Entonces, a orillas del mar
virtudes y vicios
son sendero de nuestra vida,
el signo de nuestra llama.
Juan-José Reyes Ríos
Extracto del poemario “Fábula y poesía”.
Web: http://www.galeon.com/jjreyesrios...

Silencio.
oscila el vegetal,
el papagayo grita,
la nube se levanta,
todo lo capta mi mente
y lo siente mi corazón:
el hambre, la guerra,
la muerte súbita…
la añoranza.
Sentir.
Amada palabra
que transmite sosiego.
Sentimiento,
sensibilidad…
mundo sensible.
A veces, muévese
entre el ser real y el ficticio.
Vivir no sólo fuera de sí,
sino también dentro de uno,
es norma fundamental;
porque adentrándonos
en lejanas orillas de luz,
ensanchamos nuestro espíritu,
nuestra necesaria percepción,
y sintonizamos con la vasta realidad
que configura nuestro universo.
La introspección,
la percepción de uno mismo,
cuán indispensable es en este
y en todos los mundos posibles.
Es necesario otrarse
para valorar la dimensión
y cualidades de lo existente.
Alguien, añadiría: “Y ...

Se ha dicho que el Universo
es un poema gigantesco,
en el que los vocablos son dinámicos
y algunos incluso respiran.
Los que respiran
poseen un mundo interior
que es representación del Universo.
Este poema gigantesco
está sujeto a principios, reglas,
y, sobre todo, un contexto.
Podría imaginar
otro universo mayor
que contuviera a este Universo.
Si un vocablo escapara
del poema gigantesco,
se hallaría a merced de un espacio,
cuyos principios, reglas
y, sobre todo, el contexto,
serían bien diferentes.
Pues si fuesen similares,
seguro que se reducirían,
ambos, a uno solo.
Y acaso nos hallemos
en tal ilusoria reducción.
Otra cosa son los universos
paralelos a este Universo,
de la cual cosa no tengo constancia.
Juan-José Reyes Ríos
Extracto del poemario “Fábula y poe...

Una blanca nube,
las amapolas de mayo,
la hierba tras el chaparrón,
la noche refrescando al espíritu,
ojos soñadores y versos de frenesí,
cristales que son del cerebro metáfora,
y lagos con sus cisnes en vigor.
Se yergue el junco,
se abre el sauce llorón,
altiva brota la violeta,
la rosa alcanza su soñada belleza,
asoman las peonías pizpiretas.
La Naturaleza es abundancia,
biodiversidad, incontenible hermosura.
Sin ella, nuestro sueño,
nuestra existencia no sería total;
la virtualidad es ajena
a la majestad natural.
Anhelo silencio
y eternidad para el alma;
que finalmente pueda danzar
gozosa en torno al misterio.
Todas las partículas se hallan
en mutua dependencia,
así como mis versos dependen de ti,
apreciado lector.
Juan-José Reyes Ríos
Extracto del poemario “F...

Bebe purpúreo vino, Jayyam,
mas aparta de ti la tristeza,
la pena, la inexistencia… la muerte.
¿Ves esa linda ánfora
con sus brazos en jarra?
Espera de nosotros
que la invitemos a bailar,
que gocemos con airoso baile,
que cambiemos la nada
por la serena sabiduría.
El universo, gracias a la intuición,
ya no pertenece a los dioses,
sino al espíritu de hombres fascinados
que se atreven a configurar
lo hasta ahora inabarcable, lo eviterno.
Tú y yo, sentimos el amargor de la vida,
aunque uno de los dos
busca consuelo en la copa de vino.
Somos devotos de la razón,
de los principios inalterados,
de la intuición que se alza por encima
de todo convencionalismo.
El lenguaje, libre, dulce, claro,
nos reúne en la autenticidad:
somos intérpretes de la conmoción mundial.
Abomina...

Es mi visión tan ardiente,
es mi búsqueda tan abismal,
que numerosas maravillas
cual mariposas vuelan
rejuvenecidas en mi mente,
por la arbórea disposición
de mi romántica luz interior.
Creo en los confines,
en la desnudez total,
en amaneceres con ritmos nuevos,
con esperanzas floridas
que se abren y nunca se marchitan.
Todo se torna azul
en la nebulosa fragancia
de mi intrahistoria;
todo muda hacia nueva luz,
hacia un inagotable reverdecer,
hacia un plácido remanso
donde el pensamiento del hombre
no se pierde en auroras de soledad.
Si la memoria es cristal,
¿quién osará romperla,
invertir la faz de su espejo,
o cruel con la orilla recordada,
eliminarla de los adentros?
Es mi visión tan ardiente
que siento temor por la errática hoja,
que desnuda se desprende de l...

[El escarbaorejas
es un instrumento
en forma de cucharilla,
propio para limpiar los oídos
y sacar la cerilla
que se cría en ellos].
Tú, excelso instrumento,
cucharilla dadivosa,
que tuviste origen en la China,
no dejarás de estimularme,
limpiando mis sucios oídos
de tan embrutecida cera.
En ti se aúnan limpidez
y comedida delicadeza;
y al actuar tan discretamente,
ya se oyen armonías líricas,
donde antes sólo se oían
espantosas disonancias.
Una vez limpios los oídos
-delicada cucharilla
por femeniles dedos animada-,
¡qué depurada pasión me inflama,
qué ennoblecida liberación
de horrendas impurezas
conduce mi jovial espíritu
a la noble y universal deriva!
¿Qué otro arte de bien,
tan sensual y limpiador,
puede producir en breves instantes
tan hondo estremecimient...

Vino a mí súbitamente,
o eso a mí me parecía.
Muy grave y reflexivo,
me dijo calmo y sin ira:
“Para escribir disparates
no hace falta verde inventiva;
basta con una mirada otoñal
y agitarse en venturosa umbría.
Garabatos desde la feraz vega,
¿a quién llenarán de alegría?
Y bajo el influjo de la mar,
¿cómo será tal caligrafía?
Mejor no adentrarse en tinieblas
que susciten placidez fría.
Para escribir disparates
no es necesaria la herida;
basta con rendir la mirada
a una aurora florecida.
A veces, extraño sentido
se convierte en pomposa risa;
mas si el sol está ausente,
no peligrará la dicha.
El imperio de los sentidos,
la dura y amarga vida,
el maligno pensamiento,
la clara luz del día,
harán del torpe disparate
una fábula de ilusión perdida”.
Juan-José Reyes Rí...

Claro espejo de la mar,
fantasía de líquida mortalidad,
visión y nostalgia de marina brisa.
En los vaivenes subacuáticos
triunfa inesperada vida,
mientras en la mudable superficie
un balandro su perfume aspira.
¡Qué pasión de mar,
qué clara noticia
de cuna ancestral!
Amorosa y marina es mi pasión,
cuando tiendo la mirada
al incierto horizonte
que se curva tan airoso.
Renovada la vida,
arribando la esperanza
a playas de blanca espuma…
¡qué dulce sensación nos invade,
qué colores, qué brillos, qué cielos!
Ahora, por momentos, soy niño
junto al corazón de la mar,
niño jugando con sus olas,
soñando con ojos de cielo,
aventurándome al infinito,
floreciendo cual árbol en la mar
y con las historias de sus adentros.
El rumor de la mar,
es un cuento lejano
de seguro adv...

El macramé es el arte de diseñar
nudos y trenzados decorativos.
En el bordado y brocado,
China ya fue sobresaliente,
como lo ha sido, y lo es,
en las labores de macramé.
Tales nudos y trenzados
se elaboran con hilo de algodón,
de yute, de lino, de seda
y de otras fibras naturales.
Aparte de la forma del tejido,
es decir, del concreto diseño,
es la utilización de los colores
(el dominante y los accesorios)
lo que determina su fuerza.
La búsqueda de la armonía
y de la clara simbolización
es lo que más importa.
Juan-José Reyes Ríos
Extracto del poemario “Fábula y poesía”.
Web: http://www.galeon.com/jjreyesrios