Que el cristal intente arrancarme la superficie
sería la suerte de quien se alegrára
tal artífice poco humilde no mostraba su cara
solo unos ojos con los cuales no miraba.
El paso fue necesario, andaba y andaba
mi mente un calvario , buscaba y buscaba
queria tocar tu perfume de andar y nada
afrontaba y callaba.
Drámatica es , mi falta de esperanza
la droga se hace dueño de mi cabeza , mi casa
me quedo solo , quiero quitarme del medio
gritar y expulsar mi perfume de diseño.
De nuevo saludo a la nostalgia
tan noble ella y su oscuridad que la acompaña
es elegancia, anda ella cómoda
pero hoy no eres bienvenida , tu perfume mancha
No prometas amistad
que sólo ha de durar
hasta que la flor
se deshoje.
No me digas que me aprecias,
pues el oído con la canción se queda,
pero al pasar las hojas del calendario,
ya mi nombre has olvidado.
Sólo quieres quedar bien
diciéndome que te importo,
pero los hechos siempre descubren
lo falso que es todo.
No intentes aprovechar esas facetas
que a ti ayudarte pueden,
si en reciprocidad tu mano no tiendes
cuando el agua me ahogue.
No me ofrezcas tu compañerismo
únicamente porque de ello
provecho saques,
para luego cuando la vida te zarandea,
cuando eres un don nadie cualquiera,
con disimulo evitas mi presencia.
No me des este regalo,
porque no lo voy a apreciar;
prefiero la manzana
dispuesta a envenenar
que la amistad hipócrita
cuyo filo mortal
la confian...
CAMALEONICA BLANCURA
Autor: JOEL FORTUNATO REYES PEREZ
Y las blancas...
¡Penas al final...!
Se vuelven submarinos...
Y en ellas duermen...
¡Las campanas!
...¡Camaleones y camellos!...
Perfilando... Acróbatas... Perímetros
¡Calurosa incógnita... Y concordia!
Vieja pena... Y apogeo
¡Blancura natural...!
¡Cripta entretejida de conflictos!
Al final, entre tumba y cielo.
Blancura natural...
¡Pero yo soy ciego... Hermano!
No la veo, no sé qué es
¡Dímelo, dímelo!
Aventurera y cálida serpiente
Con tú escandaloso silencio...
El desprecio por la vida cambia...
...El dinero por la treta
...El poder por el engaño
...El honor por el ardid
¡Dime,...
El mundo...
¡una jaula de locos!
En el mundo andan sueltos
muchos locos que arañan
de la noche a la mañana,
ya no duermen por costumbre
inmersos en sus maldades.
Sin valores ni respeto
sólo odio y falsedad
y las almas nobles vagan
perdidas entre sus sueños
nunca saben si mañana
alguien las apuñalará.
Es el odio que domina
este mundo de delirios
gente perdida y abrumada
vaga en él sin esperanzas.
Sería mejor
que mientras duerma
envuelta en la inconsciencia
me alcance una muerte vana.
Maria G. Benacquista
Granitos de Arena, 'Inquietudes del Alma'
Ilustración: Luca Meloni
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